En la cumbre de París inaugurada por el presidente Emmanuel Macron, se colocaron sobre la mesa la lucha por la pobreza y el cambio climático.
Siendo el segundo día de la Cumbre para un Nuevo Pacto Financiero Mundial, el mandatario francés se pronunció con un nuevo consenso internacional.
La pobreza y el cambio climático, temas principales en el segundo día de la Cumbre en París
El día jueves 22 de junio, Emmanuel Macron, presidente de Francia, dio inicio a una nueva Cumbre
con el objetivo de plantear un Nuevo Pacto Financiero Mundial, donde decenas de líderes mundiales son partícipes.
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La cumbre estaba pautada para dos días seguidos, siendo el día de hoy viernes, su último día. Es así como en la nueva reunión entre los representantes, el presidente mandatario Macron, presentó este viernes «un nuevo consenso» internacional.
El acuerdo propuesto, trata sobre una serie de estrategias e ideas generales para abordar la lucha contra la pobreza y por el planeta, financiándolas conjuntamente.
Sin embargo, el francés opina que la concreción de medidas específicas basadas en estas ideas generales puede tardar.
Todo queda en las manos de los líderes
Ante su pronunciamiento sobre la lucha de la pobreza y el cambio climático en la cumbre de París, Macron explicó que ahora son los países participantes los que tienen que decidir si las asumen.
A su vez, el presidente del país europeo, advirtió del riesgo de dejar pasar esta oportunidad.
De esta manera, Macron aseguró que, de la «discusión muy libre» que ha reunido en París a una cuarentena de jefes de Estado y de Gobierno, han salido «no son sólo palabras, sino mecanismos de acción», así como la voluntad de construir unidad en la comunidad internacional.
«Si fracasamos, iremos a una fragmentación de las instituciones internacionales», añadió, después de referirse a la situación delicada que atraviesan esas instituciones.
Electrochoque de financiación
En contexto, el mandatario francés apunta que todos los participantes están de acuerdo en que se debe de eliminar la pobreza en el mundo y proteger el planeta.
Para ello –explica- se necesita lo que él ha llamado «un electrochoque de financiación» de dinero público y capitales privados. Debido a que el objetivo es que «ningún país tenga que elegir entra la lucha contra la pobreza y la protección contra el cambio climático».
Sin embargo, a la hora de concretar las soluciones, casi todo está por hacer y aunque la cumbre no tenía mandato para tomar decisiones, los resultados pueden parecer magros a la vista de la insistencia de los líderes de países del sur en que querían medidas concretas.
Impuestos internacionales por definir
El presidente francés Emmanuel Macron, defendió el principio de «financiación internacional» para combatir la pobreza y la crisis climática.
Para lograrlo, Macron sugirió la implementación de impuestos a las actividades que más se benefician de la globalización, específicamente al transporte marítimo.
Sin embargo, debido al rechazo de varios países -con intereses registrados en el sector del transporte marítimo- se ha delegado la responsabilidad de abordar esta cuestión a la Organización Marítima Internacional (OMI), quien discutirá este tema en una reunión programada para julio.
Por lo tanto, Macron ha delegado a la OMI la tarea de encontrar soluciones para la imposición de impuestos que puedan financiar la lucha contra la pobreza y la crisis climática.
Para Macron, la puesta en marcha de ese tipo de impuestos, se tendría que discutir en un marco como la OCDE, que ya ha permitido establecer un tipo mínimo a nivel mundial al impuesto de sociedades.
Una nueva reforma
Todos los participantes coincidieron en la necesidad de una reforma en profundidad del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial (BM), que recibieron críticas en algún caso acerca de mandatarios de países del Sur.
La directora ejecutiva del FMI, Kristalina Georgieva, y el presidente del BM, Ajay Banga, asumieron el reto y señalaron algunas líneas de cambio.
Georgieva anunció que se ha convenido redirigir para las necesidades de los países más vulnerables 100.000 millones de dólares de los derechos especiales de giro, que son como el fondo de reservas internacionales del FMI.
Mientras que Banga apuntó que se trabaja en una cláusula que los países endeudados podrán activar para suspender los reembolsos en caso de sufrir una catástrofe.
Por su parte, la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, se mostró convencida de que esta cumbre «es una etapa importante para reformar la arquitectura financiera para que sea más reactiva», señalando igualmente varias líneas de progreso.
En particular, el proyecto para que los bancos multilaterales de desarrollo puedan movilizar 200.000 millones de dólares en capacidades de préstamo en los diez próximos años.
Macron convocó a los participantes a una nueva cumbre dentro de dos años para hacer un seguimiento de lo acordado, y anunció que se hará un informe cada seis meses para monitorizar el cumplimiento.
Con información de | EFE
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