Un equipo de científicos del Instituto de Biofísica Carlos Chagas Filho, en la Universidad Federal de Río de Janeiro, liderado por la Dra. Márcia Alves Marques Capella, está llevando a cabo una investigación pionera que explora el potencial terapéutico de la música en la lucha contra el cáncer.
En sus experimentos, expusieron cultivos celulares, tanto sanos como cancerosos, a diferentes piezas musicales para analizar sus efectos. Los resultados obtenidos fueron sorprendentes: la Quinta Sinfonía de Beethoven demostró una notable capacidad para destruir aproximadamente el 20% de las células cancerosas sin dañar las células sanas. Un efecto similar, aunque quizás menos pronunciado, se observó con la obra «Atmosphères» de György Ligeti. En contraste, la «Sonata para dos pianos» de Mozart no mostró un impacto significativo en las células estudiadas. Este descubrimiento sugiere que ciertos elementos musicales, como el ritmo y la frecuencia, podrían ser los responsables de estos efectos citotóxicos selectivos.
Si bien el mecanismo preciso que subyace a estos resultados aún no se comprende por completo, este estudio representa un avance significativo en la búsqueda de tratamientos oncológicos no invasivos. La posibilidad de que la música pueda interactuar directamente con las células cancerosas, induciendo su destrucción, abre un campo de investigación fascinante y lleno de posibilidades. Se necesitan más estudios para validar estos hallazgos y determinar su viabilidad como terapia complementaria o incluso principal en el tratamiento del cáncer. La investigación continúa para desentrañar los misterios de esta prometedora área de la oncología.
Con información de almomento.mx
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