Los Knicks de Nueva York alcanzaron la final de la Conferencia Este por primera vez en 25 años, poniendo fin al reinado de un año de los Celtics de Boston como campeones de la NBA con una sorprendente victoria de 119-81 en el sexto partido el viernes por la noche.
Jalen Brunson y OG Anunoby marcaron 23 puntos cada uno para los Knicks, que se enfrentarán a los Indiana Pacers, el mismo equipo al que se midieron en su última final de conferencia en el año 2000. El primer partido se jugará el miércoles por la noche en Nueva York.
Los Knicks no lograban ganar una serie de playoffs en su casa desde la final del Este de 1999. Así que la celebración comenzó al final del segundo cuarto, que fue un encuentro desequilibrado, en el Madison Square Garden, y seguramente se extendería hasta largas horas de la noche en el estadio.
Mikal Bridges anotó 22 puntos y Karl-Anthony Towns contribuyó con 21 para los Knicks, cuyo margen de victoria de 38 puntos fue el mayor en un partido de playoffs.
Jaylen Brown sumó 20 puntos para los Celtics, quienes se vieron privados de su máximo anotador, Jayson Tatum, debido a una rotura del tendón de Aquiles en el Juego 4, pero confiaban en que aún tenían lo necesario para regresar a Boston para el Juego 7 y mantener viva la defensa de su título.
Rápidamente quedó claro que eso no iba a suceder.
Los Celtics tuvieron una ventaja de al menos 14 puntos en cada uno de los primeros cinco juegos, pero esta vez los Knicks comenzaron rápidamente y continuaron apretando hasta que el entrenador de Boston, Joe Mazzulla, decidió retirar a sus titulares en el tercer cuarto cuando la diferencia alcanzó los 41 puntos.
Los Knicks anotaron los primeros siete puntos del segundo cuarto, poniendo el marcador en 33-20. Nueva York inició con un parcial de 13-3 que dejó el marcador en 49-27, una secuencia destacada por el bloqueo del base Deuce McBride, quien mide 1,85 metros, a un tiro de Derrick White que permitió la segunda canasta seguida de Josh Hart tras recibir una falta.
Ben Stiller y Lenny Kravitz se saludaron con un apretón de manos y un abrazo después en la fila de celebridades, donde las estrellas se mantenían de pie y aplaudiendo gran parte de la noche, al igual que los aficionados ubicados cerca de la parte alta del estadio.
Los Knicks se encontraban al frente 64-37 al finalizar la primera mitad, logrando una ventaja de 27 puntos que igualó su récord más alto en un partido de playoffs durante la era del reloj de posesión. En el séptimo partido de las Finales de la NBA de 1970, los Knicks tuvieron una delantera de 69-42 sobre los Lakers, gracias al regreso de Willis Reed tras su lesión, lo que llevó a los Knicks a conquistar su primer campeonato de la NBA.
Transcurrieron tres años más, pero desde entonces los Knicks no habían logrado anotar, y parecía que este no iba a ser el año en que cambiarían la historia, especialmente después de que su marca contra Cleveland y Boston fue 0-8, siendo estos los dos equipos que finalizaron por encima de ellos en la Conferencia Este.
Sin embargo, los Knicks no necesitaron preocuparse por los Cavaliers y lograron revertir la situación por completo contra los Celtics, superando déficits de 20 puntos en las segundas mitades de ambos encuentros en Boston para iniciar la serie.
Hart finalizó con 10 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias para los Knicks.
Con información de | listindiario.com
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