Para un óptimo cuidado y salud de la piel es necesario mantener una rutina de cuidado facial dividida en dos, una para el día y otra para la noche. Debido a las diferentes necesidades de la piel en cada momento, se requieren cremas y cosméticos distintos. La protección contra la contaminación y el sol es crucial durante el día, mientras que la noche ofrece una mayor receptividad de la piel a los ingredientes activos.
El cuerpo humano funciona con un reloj interno complejo, conocido como ritmo circadiano, controlado por una región específica del cerebro. Este ritmo sincroniza las funciones celulares, incluyendo las de la piel, que muestran una mayor capacidad de regeneración y reparación durante la noche. Comprender este proceso biológico permite una selección más informada de productos nocturnos para optimizar los resultados del cuidado de la piel.
Mientras duermes
Un sueño reparador y un descanso nocturno adecuado son esenciales para la belleza y la salud de la piel. La regeneración celular cutánea se acelera durante la noche, con un aumento en la renovación celular, el flujo sanguíneo y la permeabilidad, lo que optimiza los procesos de reparación.
Durante el descanso nocturno, las células de la piel requieren un aporte extra de nutrientes. Por ello, la aplicación de una crema nocturna de calidad es fundamental para potenciar la capacidad natural de reparación de la piel y maximizar la efectividad de los activos antienvejecimiento durante este periodo de mayor receptividad celular.
La producción natural de colágeno se ve favorecida durante la noche, mientras que la disminución de la producción de sebo provoca una pérdida de hidratación cutánea. Para compensar esta pérdida, una crema rica en humectantes resulta fundamental. Como explica Esperanza Sáenz, responsable de imagen de Nezeni Cosmetics, el aumento de temperatura y la acidificación del pH de la piel durante el sueño contribuyen a una mayor sequedad cutánea.
Las cremas nocturnas, ricas en activos reparadores, requieren una piel previamente limpia de maquillaje e impurezas. Filip Van, cofundador de Di Oleo, recomienda una aplicación mediante masaje circular y drenante con las yemas de los dedos sobre mejillas, cuello, frente y óvalo facial. La zona del contorno de ojos, por su delicadeza y mayor visibilidad del envejecimiento, merece especial atención, según el experto.
¿Cómo elegir la crema correcta para la noche?
La eficacia de una crema no se correlaciona directamente con su precio. La calidad no reside en el coste, el aroma o la cantidad de ingredientes, sino en la selección de activos clave. Priorice la presencia de componentes como el ácido hialurónico, la betaína y la vitamina E, más que la cantidad de ingredientes en la fórmula.
Asimismo, la ausencia de ciertos ingredientes es tan crucial como la presencia de otros. Evite productos que contengan parabenos, aceites minerales, siliconas y sulfatos. Al elegir una crema nocturna, considere los siguientes aspectos:
* Tipo de piel: Seleccione un cosmético adecuado para piel seca, grasa, mixta o sensible.
* Ingredientes naturales: Priorice formulaciones con ingredientes 100% naturales para una mejor absorción y mayor eficacia.
* Rutina completa: Combine la crema nocturna con otros cosméticos como hidratantes, sérums y cremas de contorno de ojos para un cuidado integral.
Crema para la noche VS crema de para el día
La necesidad de cremas diferentes para el día y la noche no es una estrategia de marketing, sino una respuesta a las distintas necesidades de la piel a lo largo del día. Durante el día, la piel se enfrenta a agresiones externas como la contaminación, la radiación solar, los cambios de temperatura y la luz azul de los dispositivos electrónicos. Estos factores contribuyen al estrés oxidativo y al aumento de radicales libres, lo que justifica la necesidad de una protección y cuidado específicos durante las horas diurnas.
Las cremas de día, formuladas para proteger contra las agresiones externas (radiación solar, contaminación), contienen filtros solares e hidratantes. Su función principal es proteger y mantener un aspecto fresco y luminoso durante el día. Las cremas de noche, en cambio, se centran en la reparación y regeneración celular nocturna, proporcionando nutrientes y activos reparadores para una piel revitalizada al despertar. El uso de una crema de día por la noche puede resultar contraproducente, aumentando la producción de sebo y favoreciendo la aparición de imperfecciones.
Con información de Theobjective.com
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